¿Qué queremos que pase en las aulas con la inteligencia artificial generativa?

La aparición de la inteligencia artificial generativa ha generado un nuevo debate sobre su impacto en la educación. Paola Dellepiane, docente de la UCA, subraya la importancia de estas herramientas como apoyo en el aula, siempre que se empleen de manera consciente. A través del curso PromptIA-Pedagogía Inteligente, se invita a los educadores a explorar estas innovaciones, con el objetivo de integrarlas eficazmente en sus clases, sin reemplazar la capacidad humana de análisis.

La inteligencia artificial (IA) existe desde el siglo pasado, pero recientemente se introdujo una nueva tecnología que permite hablar de inteligencia artificial generativa (IAG). Paola Dellepiane, docente de la UCA y coordinadora del curso PromptIA-Pedagogía inteligente de la Universidad, explicó: “Es generativa porque a partir de una instrucción del usuario y basándose en la información previa que se encuentra en internet, el programa genera un contenido nuevo, inventado”. A su vez, aclaró que este contenido puede ser coherente y lógico, pero no necesariamente verdadero, por eso es fundamental mantener el sentido crítico.  

Tras la revolucionaria irrupción y protagonismo que adquirió la IAG en 2022, el debate se centra en las ventajas y desventajas que representa para los docentes, los alumnos y las dinámicas de aprendizaje. Al respecto, Dellepiane considera que “la IAG no es una preocupación, sino una ocupación del sistema educativo”, y agregó que “es un camino de ida, la tecnología nos ha atravesado a nivel social, cultural, global, y está para quedarse”.  

Dellepiane recomienda utilizar las herramientas de IAG, mientras sea de la manera adecuada y con un propósito. Sobre esto, profundizó: “Si quiero generar un escrito o mejorar una planificación que ya hice para mis clases, entonces, ahí me sirve”. Se trata de encontrar modos de uso que ayuden tanto a los docentes como a los alumnos, siendo conscientes de que la IAG no reemplaza la inteligencia y capacidad de análisis humano.  

Al respecto, la docente comentó: “Yo apunto más a la IAG como asistente del ser humano, tanto alumnos como docentes y cualquier profesional pueden aprovecharla”. Simultáneamente, recalcó que utilizarla sin conocimiento previo del tema puede ser perjudicial: “Recomendaría usarlo para validación y verificación de actividades que uno haga, es necesario conocer el tema para poder contrastar lo que me aporta el chat”.

Frente a las tesis que proponen que la IAG puede generar una pérdida de la capacidad de análisis y reflexión, Dellepiane contempló la posibilidad de introducir el uso de estas herramientas en las aulas y las consecuencias para los alumnos: “Para mí no deteriora el proceso del alumno, al contrario, facilita y hasta hace ganar tiempo”. Específicamente sobre los posibles usos del ChatGPT, considera que “desde la escritura y la parte semántica es muy bueno; sin embargo, para obtener información verdadera hay que ir a la fuente”.  

Algunos docentes, Dellepiane incluida, entienden que la introducción de herramientas de IAG es una oportunidad para enriquecer la experiencia en el aula y el proceso de aprendizaje. “Hay profesores que lo traen como una herramienta de ejercicio para los alumnos y lo que se genera es una retroalimentación y un trabajo cognitivo que es válido”, resaltó. También puede asistir en la organización de clases: “Le puedo dar mi planificación del año pasado y darle instrucciones, pidiéndole que me ayude a mejorar las clases”, comentó Dellepiane sobre la manera en la que incorpora estas herramientas.   

Ante la pregunta sobre lo que le gustaría que pase con la IAG en las aulas, la docente dijo: “Me gustaría promover el uso auténtico de estas herramientas, evitando su empleo para la copia o el plagio, y en mi caso planeo resignificar mis clases, incluyendo el ChatGPT y la IAG en algunas prácticas”. Seguidamente, aconsejó: “Yo creo que, como docente, el consejo que daría es no resistirse, sino traerlo al aula y buscar un equilibrio”.

“la IAG no es una preocupación, sino una ocupación del sistema educativo”, expresa Paola Dellepiane.

Así, el curso PromptIA-Pedagogía Inteligente de la UCA, dictado por el Departamento de Educación, indaga sobre estas nuevas dinámicas de enseñanza y aprendizaje, invitando a docentes y profesionales a formar parte. El objetivo, dijo Dellepiane, es que, al finalizar el curso, cada uno tenga una producción de algún material didáctico construido a partir de la IAG, que pueda implementar en sus aulas o profesión.  

Dentro de la oferta de carreras de grado del Departamento de Educación de la UCA se encuentran los profesorados universitarios en Educación Inicial y Primaria, el profesorado Superior, y las licenciaturas en Dirección y Supervisión Educativa y en Educación Inclusiva y Efectiva (ciclo de complementación curricular).   

Fuente: Página de UCAConsudec

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